Flujo Social

Dejan libre al autor del atentado de Lockerbie que causo la muerte de 270 civiles en 1988, este es recibido como héroe en Libia ocasionando la censura de EEUU y Reino Unido.

           Las autoridades de Escocia, han puesto en libertad al condenado a cadena perpetua Abdelbeset Ali Mohmed al Megrahi , quien fue declarado culpable de la explosión en pleno vuelo de el avión de la compañía aérea Pan American World Airways, en diciembre de 1988. Este hecho es conocido como el atentado de Lockerbie y causo la muerte de 270 personas.

Los motivos de la liberación del condenado Abdelbeset Ali Mohmed al Megrahi, quien nunca ha reconocido su culpabilidad tienen un basamento humanitario, ya que ha sido diagnosticado con cáncer de próstata en fase terminal y según pronósticos médicos le restarían tres meses de vida.

Lo excepcional de esta noticia, al margen de la decisión tomada por la justicia de Escocia con la liberación del perpetrador de el crimen, ha sido la acogida de héroe que ha recibido Abdelbeset al llegar a Libia, lo cual a originado la censura de EEUU y el Reino Unido y un enrarecimiento de las relaciones, que pudiera entorpecer el avance en el camino a la integración de esa nación, la cual en el año 2003 reconoció mediante una carta entregada al Consejo de Seguridad de la ONU, su responsabilidad en los atentados de el vuelo 103 de Pan American lo cual contribuyo al levantamiento de las sanciones impuestas por las Naciones Unidas  a  ese país.

Hoy nada es sorprendente, solo se puede decir que los acontecimientos no son habituales o no ocurren con regularidad, el enaltecer el crimen o ser indiferentes a el va formando parte de nuestras vidas.

Lo que ha ocurrido en este caso es una actitud censurable, como lo es también; cada guerra que existe en el mundo y cada muerte que ocasionan las armas creadas por el hombre y solo sirve para confundir y combustionar mas esa mezcla de indiferencia al dolor ajeno con la conveniencia, que convierte a criminales en héroes y a héroes en criminales, según sean las circunstancias alejándonos cada día mas de la efímera paz mundial.

Cada día nos volvemos mas indiferente y radicales, asumimos posiciones extremistas en cada momento amparados en olvidos, por fidelidad a la causa que defendemos o por percibir algún beneficio, nuestra escala de valores es regulable como un termostato.

No queremos aviones que estallen en pleno vuelo llenos de civiles inocentes; pero fabricamos C4, no queremos asaltos pero vendemos motos y como promoción le obsequiamos un arma al cliente, no queremos guerra pero fabricamos tanques, bombarderos y cuanto invento tecnológico hemos podido imaginar para exterminar la vida, nuestra gran justificación es la defensa.

Pero ello no es más que una muestra de nuestra propia hipocresía, que nos lleva a justificar nuestros depredadores instintos que originan como efecto, la muerte de los inocentes, que siempre terminan pagando con su vida el aparente éxito ajeno.

Hoy todas las criaturas comunes de este mundo son vulnerables, viven en el vaivén de la cuerda floja, sufriendo por sus perdidas y observando en muchas ocasiones como los culpables son premiados o viven riendo en la impunidad y la indiferencia, no hay que dudar que esto ocurre hace siglos y seguirá ocurriendo hasta que realmente logremos evolucionar.

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